Vaya jornada más desastrosa para el Albacete en el inicio de la segunda vuelta. Ganó el Xerez, ganó el Rácing de Ferról, empató el Poli Ejido, empataron el Nástic y el Alavés, y también empató el conjunto manchego, que no fue capaz de ganarle al Elche a pesar de jugar más y mejor que los ilicitanos.
El Alba sorprendió a todos en el Martínez Valero. Tras una semana de caras largas y entrenamientos lánguidos y sin intensidad, el equipo mostró su mejor cara ante el Elche, quizás porque sobre el terreno de juego había un once más equilibrado, al menos a la hora de intentar jugar al fútbol, aunque sorprendiera que se quedara fuera uno de los que estaba siendo de los mejores en las últimas semanas, Bauzá, y se insistiera una vez más con otro que aunque al final tuvo una buena actuación no está siendo, ni mucho menos, de los destacados, por mucho empeño que tenga Quique Hernández de ponerlo contra viendo y marea. Por cierto ¿dónde estaba Cañas? ¿No dijo el presidente que no había ningún problema? ¿Entonces porque no va ni convocado y se dice que hay que fichar a un medio centro? Que me lo expliquen.
Lo que resulta extraño es ver como el Albacete se transforma, como el Dr. Jekyll y Mr. Hyde, y pasa de la noche al día en apenas una semana. Del casi ridículo en la primera parte ante la UD Las Palmas vamos y le pegamos la corrida al Elche. Y prácticamente con los mismos jugadores. ¿Qué le pasa a este equipo? ¿Porqué esos repentinos y bruscos cambios de actitud? Porque aquí de lo que se trata es de actitud y compromiso, y cuando se pone sobre el césped, este Albacete demuestra que no es tan malo como lo pintan.
Otra cosa es meter goles, que parece reservado para otros. Seis ocasiones clarísimas se fallaron ante el Elche, tres de ellas en el tramo final, con 1-1 en el marcador y un hombre menos que el rival. El Albacete no puede permitirse esos lujos. No puede dejar escapar esos puntos con el gran déficit que padece. Y hasta se contagió el pequeño Alustiza, que demostró en su debut tener un pequeño motor en sus cortas pero fibrosas piernas. Vaya tela cuando coge la moto; volvió loca a la defensa del Elche, pero tuvo la oportunidad de cubrirse de gloria y la tiró fuera. Esperemos que en el próximo partido tenga más acierto.
Por cierto, que este sábado viene el Xerez y al Albacete sólo le vale ganar. Aquí ya no cuenta un empate o si jugamos como el ‘Dream Team’. Aquí sólo vale ganar. Si no se le gana el sábado al Xerez… no quiero ni pensarlo.
