Que tendrá ser presidente de federación que todo el mundo intenta agarrarse al sillón cuantos más años mejor, aunque lo cierto es que es algo innato a todos los presidentes, que una vez alcanzado el poder se aferran al cargo y no hay manera de echarlos ni con aceite hirviendo. Bueno, siempre está la excepción, ser presidente de la comunidad de vecinos, lo que todo el mundo rehuye y al final lo hace a regañadientes y por imperativo legal.
Veinte años lleva ya Ángel María Villar al frente de la Real Federación Española de Fútbol. Ha superado obstáculos muy importantes y parece agarrado al sillón con el mejor loctite. Juicios, escándalos, graves situaciones de desagravio -todavía estamos esperando la clausura del Camp Nou desde no sé que año-, indultos sin venir a cuento y no se cuántas cosas más. Y ahí sigue, 20 años de mandato. Para que luego se quejara José María García de Pablo Porta, con aquel mítico «Pablo, Pablito, Pablete… te estás eternizando en el cargo», cuando sólo estuvo nueve años en el mismo, ni la mitad que Villar, que a pesar de haber tenido y de tener una fuerte oposición ahí sigue, como Don Erre que Erre.
Y como parece que les gusta montar ‘pollos’ a los presidentes de federaciones, al carro se han unido últimamente el presidente de la Federación Española de Tenis, Pedro Muñoz, y el de la Federación Española de Baloncesto, José Luis Sáez.
El segundo se empeña en ponerle piedras en el camino al bueno de Pepu Hernández, que no sé si llegará a los Juegos Olímpicos. Será envidia por el buen rollo que hay en la selección y porque no le dejan entrar en la ‘familia de la pocha’. Sáez tuvo como antecesor a Ernesto Segura de Luna, que en diferentes etapas acumuló unos 30 años como presidente. Muchos años, pero con muchas menos polémicas que Sáez en su apenas año y medio de mandato.
Por su parte los de la raqueta están que trinan. Pedro Muñoz ha impuesto el aquí mando yo y al que no le guste que se vaya a jugar a la petanca. Todos sabemos que los tenistas de élite son un tanto tikis-mikis, pero algo de razón llevarán cuando son ellos los que se tienen que jugar las habichuelas contra Estados Unidos en la Davis y su opinión se la ha pasado el susodicho Muñoz por el ‘arco del triunfo’.
Muñoz sustituyó en el 2005 a otro histórico del tenis, Agustín Pujol, con 19 años al frente de la federación. Las principales raquetas de nuestro tenis, incluido el rodense Guillermo García López, han firmado un manifiesto pidiendo la inmediata dimisión de Pedro Muñoz. También varias territoriales han secundado la idea. Pero aquí las quejas entran por una oreja y salen por la otra.
Conforme están las cosas, vayan apuntando, que los próximos ‘pollos’ se montarán en la Federación de Ciclismo, en la de Balonmano o en la de Natación.
