El CV Albacete, entre la Final Four y la desaparición

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¿Vale la pena seguir luchando?El Club Voleibol Albacete afronta el día 24 el partido de ida en la eliminatoria de cuartos de final de la Copa CEV ante el Estrella Roja de Belgrado. El equipo albaceteño está escribiendo una nueva página de oro en sus 23 años de existencia. Tiene la oportunidad de alcanzar la Final Four de esta competición, y meter por primera vez a un equipo albaceteño en una ‘final a cuatro’. Estamos ante un hito en la historia del club, del voleibol regional y del deporte albaceteño.

Sólo el Balonmano Ciudad Real, con un gran presupuesto y muchísimos apoyos, ha conseguido más en Castilla-La Mancha. Dicen que las comparaciones son odiosas, y este caso, por supuesto, también. En Ciudad Real se hizo una gran apuesta por el balonmano y a base de talonario se ha conseguido tener, durante muchas temporadas, a una de las mejores plantillas del continente. Se construyó un pabellón, que llenan en cada jornada, y ahí puede estar el ‘quit’ de la cuestión. A ver al CV Albacete apenas se junta 500 aficionados, 1.000 en casos muy particulares. ¿Puede ser realmente ese el problema, que no se logra arrastrar a los aficionados?

El voleibol español ha conseguido en los últimos años grandes logros, de ahí que este deporte esté ganando en adeptos y practicantes. Pero quizás le falta ganarse realmente a los aficionados. Con un pabellón a rebosar, el poder del club aumentaría considerablemente, pero con la gradas medio vacías, que poder de persuasión puede tener el club para conseguir los recursos económicos que necesita. 

¿Vale la pena tanto esfuerzo? Posiblemente no. Los dirigentes del CV Albacete tienen que hacer verdadera ingeniería financiera para poder sobrevivir, y lo hacen además a duras penas y con un gran desgaste personal. Si cada fin de semana hubiera tres o cuatro mil personas en el pabellón se podría decir que vale la pena luchar, pero viendo a 300 personas, siempre las mismas ¿merece la pena seguir luchando?

Las empresas privadas no apoyan, algo ya tradicional en un Albacete que ha crecido enormemente a nivel industrial, pero que particularmente no ha sabido cuidar su deporte, que al fin y a la postre es el mejor escaparate mediático que se puede encontrar. Las instituciones llegan hasta donde pueden, porque son muchos para repartir y encuentran poca ayuda, como ya hemos comentado, en el plano privado.

Así las cosas, ¿es viable la supervivencia del club? La profesionalización de la Superliga está haciendo un corte importante. Previsiblemente en un par de años apenas queden cuatro o cinco equipos de nivel. La Federación ha tomado como referencias al derrochador Grupo 20002 o Atlético Murcia 2005, como parecen llamarse ahora, y al todopoderoso Tenerife, con unas ayudas de la empresa privada espectaculares. Pero claro, no es oro todo lo que reluce y el resto de equipos empiezan a malvivir en la categoría. Se ha disparado el mercado, pero no así las ayudas.

En definitiva, y viendo los últimos acontecimientos, parece claro que el CV Albacete vive por encima de sus posibilidades y su viabilidad a medio plazo no existe.  Más vale morir de pie que vivir de rodillas, o sea, que quizás sería el momento de echar el resto para llegar a esa Final Four y poner una pica más en la historia del CV Albacete para después echar la persiana y poner fin a una bonita aventura, que duró lo que duró, pero que mantener, teniendo en cuenta como está la situación económica actualmente, no será más que ‘hambrear’ y arrastrarse por la categoría para acabar de llegar la mismo sitio, la desaparición.

Sobre el autor

Juan Carrizo

Jugador y entrenador titulado de baloncesto, practicante de otros deportes como el fútbol, el atletismo o el tenis, trabajo como redactor de deportes en La Tribuna de Albacete desde 1991 habiendo colaborado en diferentes ocasiones y en varias emisoras locales como Radio Chinchilla, COPE o la desaparecida Arco Iris.

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